En los últimos años, Mercedes pecaba de ser en general una marca poco atrevida en el diseño de sus automóviles, sobre todo en los modelos más pequeños y asequibles. Además, dentro de las marcas Premium fue la última en incorporar a su gama modelos compactos, al contrario que sus rivales con el BMW Serie 1 y el Audi A3.
Pero “algo está pasando en Mercedes”. Con el Clase A que probamos hace unos meses, ha lanzado al mercado un compacto muy atractivo, totalmente diferente a su predecesor y que incluso consigue que ahora sean sus rivales los que pequen de continuistas. Mercedes da una vuelta más de rosca y basándose en la misma plataforma del Clase A ha desarrollado el Mercedes CLA que inaugura un nuevo segmento de cupé compacto de cuatro puertas.
El Mercedes CLA que probamos gracias a Grupo Concesur, intenta reproducir a escala la misma filosofía de la berlina cupé CLS y así ofrecer un vehículo con las mismas aspiraciones para quienes los casi 5 metros y 66.250€ del CLS se les queden grandes. Con el nuevo Mercedes CLA, la firma de Stuttgart pretende algo que ya consiguió en parte con el Clase A, captar un nuevo perfil de cliente más joven y dinámico que jamás se hubiera planteado tener un Mercedes en su garaje.
Estética agresiva y deportiva para captar nuevos clientes
El Mercedes CLA es un coche que llama la atención. Desde que lo ves en la distancia, su enorme frontal de perfil plano flanqueado por dos faros de gran tamaño, ya te anuncian la gran personalidad del modelo. En la parte trasera, los pilotos recuerdan descaradamente al CLS y culminan una silueta con una aerodinámica muy marcada y en la que la elevada altura del panel de las puertas deja más protagonismo al metal que a la superficie acristalada.
Como ya dijimos antes, el Mercedes CLA toma como base al Clase A, y eso se nota sobre todo en la parte delantera donde las diferencias son muy sutiles. Hay que tener un ojo muy avispado para notar detalles como que faros y paragolpes tienen líneas y formas algo más angulosas. La parrilla delantera también recibe algunos retoques y el capó tiene dos nuevos nervios en el centro.
Si en el frontal encontramos similitudes con el Clase A, a partir del pilar B, todo parecido con el compacto del que deriva es pura casualidad. Desde el comienzo de la puerta trasera, el techo comienza a descender vertiginosamente hasta llegar al portón del maletero que prácticamente continúa el mismo ángulo de caída que el cristal trasero. En la unidad que hemos probado, la zaga del CLA está rematada por dos salidas de escape en acero pulido que se encuentran a ambos lados de un difusor que también cuenta con detalles cromados.
Con una longitud de 4.630 mm, muchos pueden pensar que el Mercedes CLA puede robar clientela a su “hermano serio”, el Clase C que es 39mm más corto y 7 mm más estrecho. Todas las cotas son muy parecidas aunque la mayor diferencia la encontramos en la distancia entre ejes donde el CLA cuenta con 7cm menos que el Clase C. Pero aunque por tamaño puedan parecer vehículos parecidos, en realidad son muy diferentes.
El Mercedes CLA está construido sobre la plataforma que estrenó el actual Clase B para vehículos compactos de motor transversal y tracción delantera. Esto último es lo que más lo diferencia del Clase C, ya que el CLA cuenta con tracción delantera al contrario de la tradicional propulsión trasera con la que cuenta el Clase C. Aunque es un vehículo pensado y diseñado para contar con tracción delantera, en un futuro cercano también estará disponible con el sistema de tracción total 4Matic.
Divertido, equilibrado, ágil y eficiente en consumos
Por el hecho de contar con tracción delantera, muchos entusiastas del volante pueden pensar que la conducción del Mercedes CLA puede ser aburrida, pero un chasis sencillamente espectacular consigue que esto no sea así. Por autovía y con una conducción tranquila, el CLA da la sensación de ser un vehículo mucho más grande proporcionando una gran estabilidad y aplomo. Pero cuando nos adentramos en carreteras viradas, el Mercedes CLA proporciona sensaciones y diversión como pocos compactos del mercado.
El mayor logro de los responsables del desarrollo del Mercedes CLA es haber conseguido un vehículo que a pesar de contar con tracción delantera no se muestra subvirador. Gracias también a una dirección muy directa, rápida y comunicativa, obedece a la perfección las órdenes del conductor al trazar curvas y resulta muy difícil ponerlo en apuros.
La suspensión del Mercedes CLA proporciona un comportamiento impecable, teniendo la dureza necesaria para facilitar un rápido paso por curva pero sin llegar a ser incómoda en ciudad. De este excepcional comportamiento también es responsable el eje trasero multibrazo que equipa de serie en todas las versiones.
Hasta la fecha, este cupé compacto está disponible con cuatro motores: tres de gasolina (122Cv, 156Cv y 211Cv) y uno diésel bajo el apelativo CLA 220CDI que cuenta con 170Cv y que es la que hemos probado. A partir de otoño está anunciada la versión CLA 200CDI que contará con 136Cv. En las motorizaciones más potentes de ambos combustibles, el Mercedes CLA sólo está disponible con una caja de cambios automática de 7 velocidades y doble embrague.
Bajo el capó de la versión CLA 220CDI que hemos probado, encontramos un renovado bloque turbodiésel de 2.143 centímetros cúbicos que entrega 170Cv de potencia y 350Nm de par y que consigue hacer el 0 a 100 en 8’2 segundos. Aunque por cuestiones evidentes no hemos podido corroborarlo, el CLA homologa una velocidad máxima de 230 km/h. Con este motor, el CLA ofrece una muy buena capacidad de recuperación y el conductor siempre tendrá la sensación de contar con la potencia suficiente. Lo más impactante de este motor lo encontramos al sobrepasar las 3.000 vueltas. A partir de esta barrera, el motor se transforma para darnos todo su potencial e incluso llega a tener un rugido que pocas veces hemos oído en un diésel.
Como ya hemos dicho antes, la versión que estamos probando sólo está disponible con una caja de cambios automática de 7 velocidades y doble embrague que además cuenta con levas en el volante. Se muestra suave en los cambios y tiende a seleccionar marchas largas con las que se consigue un consumo muy ajustado para el uso diario. Para sacar el lado más deportivo y prestacional del CLA basta con seleccionar el modo de conducción SPORT y las marchas se estirarán hasta prácticamente el corte de inyección. Por poner un pero al cambio, como ya pasa en otros modelos de Mercedes, las levas prácticamente se hacen inservibles ya que estando en modo secuencial y al alcanzar ciertas revoluciones sube de marcha automáticamente. El cambio también “se niega” a realizar reducciones agresivas ignorando las pulsaciones en la leva izquierda, por lo que al final optarás por ir en automático.
Durante los casi 1.000 kms que ha durado nuestra prueba, las cifras de consumo nos han sorprendido bastante (para bien) teniendo en cuenta que estamos ante un coche con ciertas aspiraciones deportivas, 170Cv y cambio automático. Desde que lo recogimos en las instalaciones de Grupo Concesur hasta que volvimos a dejarlo, hemos sacado un consumo combinado 6’5 litros, llegando a realizar tramos de autovía en medias de 4’6 litros a los 100 Km. Incluso realizando una conducción más deportiva en modo SPORT, el consumo jamás superó los 8 litros a los 100 km.
Cómodo para cuatro personas y con muy buenos acabados
Del interior del Mercedes CLA poco hay que decir ya que en las plazas delanteras es prácticamente igual al Clase A que ya probamos hace unos meses. Cuenta con los mismos asientos que proporcionan una mezcla perfecta entre comodidad y agarre además de un aspecto muy deportivo. El volante también cuenta con el mismo diseño y tacto inmejorable, aunque en este caso cuenta con levas para el cambio. La mayor diferencia la encontramos en el selector del cambio, que al equipar el CLA caja automática lo encontramos situado detrás del volante por lo que en la típica situación del túnel central tendremos una pequeña guantera.
Tal y como pasa en el exterior, el interior del CLA también es totalmente diferente a partir del respaldo de los asientos delanteros. Aunque homologa cinco plazas, la plaza central es prácticamente testimonial y ni siquiera un niño podrá viajar con comodidad, tanto por la anchura como por la presencia de un elevado túnel central que presagia la tracción total 4Matic de la que hablamos antes.
Los dos asientos de los extremos son mucho más cómodos y cuentan con espacio suficiente para las rodillas, aunque no podemos decir lo mismo con la altura. Viendo el aspecto exterior del coche y la caída del techo no es una sorpresa que la altura de las plazas traseras sea el tendón de Aquiles del Mercedes CLA. Debido a un voluminoso montante del pilar C y a la caída del techo, el acceso a estas plazas traseras es algo incómodo y hace que no sea un coche adecuado para cierto tipo de personas.
Teniendo en cuenta el tamaño del coche, el maletero cuenta con unos generosos 470 litros y ofrece una gran superficie de carga con un suelo plano bajo el que se esconde un doble fondo debido a la ausencia de rueda de repuesto. Aunque la capacidad del maletero es amplia, debido a las formas de la carrocería y al diseño de los pilotos traseros el hueco de carga es bastante pequeño, por lo que introducir grandes objetos puede antojarse complicado.
El diseño, lo novedoso de su segmento y su equipamiento, hay que pagarlo
El equipamiento de serie del Mercedes CLA es muy completo, no obstante el precio de partida de este novedoso compacto es de 38.300€. Cuanta con un amplio equipamiento de seguridad activa que incluye control de tracción, control de estabilidad, sistema de frenada adaptativa, avisador de cansancio y advertencia de peligro de colisión. Además, elementos que en otros vehículos son opcionales como los faros bi-xenón con luces diurnas y el control de velocidad, en el Mercedes CLA son de serie.
Con este precio de salida y con una lista de opcionales muy apetecibles que hacen que fácilmente se alcancen los 40.000€, el CLA no es un coche muy accesible en términos económicos, pero la belleza de su línea, lo novedoso de su segmento y la tecnología de Mercedes, hay que pagarla. A cambio, el afortunado comprador tendrá en su garaje uno de los mejores vehículos diésel con tracción delantera del mercado.
Con la comercialización del CLA, Mercedes ha confirmado una tendencia que ya comenzó con el Clase A y que dará a todos sus modelos un aspecto mucho más atractivo y actual pero sin olvidar la elegancia y calidad de la que la marca alemana siempre ha hecho gala. Además, en Mercedes parecen haber aprendido de los errores del pasado y ahora son ellos quienes inauguran un nuevo segmento con un coche que no pasará desapercibido en el mercado español.
Pero su monopolio en el segmento de cupés compactos de 4 puertas no va a durar mucho, ya que el contraataque de las vecinas alemanas está al caer: Audi ya ha presentado el A3 Sedán y BMW trabaja a marchas forzadas para sacar a la luz el Serie 2. Habrá que ver si los imitadores están a la altura.
Nos ha gustado:
- Chasis
- Confort de marcha y aplomo
- Aspecto
- Consumo
No nos ha gustado:
- Acceso a plazas traseras
- Espacio para carga del maletero
- Modo secuencial del cambio automático
Datos técnicos
- Combustible: Diésel
- Potencia máxima: 170Cv a 3.400 rpm
- Aceleración 8’20 segundos de 0 a 100 km/h
- Velocidad máxima: 230 km/h
- Emisiones: 109 gr/km
- Consumo (urbano/extraurb/mixto): 5’30 / 3’60 / 4’20
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