En los últimos años, todas las marcas se han ido sumando poco a poco al segmento de los SUV de lujo, pero sin duda, uno de los impulsores del segmento fue el Lexus RX que lanzó al mercado su primera generación allá por 1998 cuando sólo tenía como rivales al Range Rover y a las primeras generaciones de BMW X5 y Mercedes Clase M.
Desde entonces el modelo de la marca nipona se ha ido actualizando levemente y sin romper con su característico estilo hasta llegar a la tercera generación actual que para realizar esta prueba ha pasado por nuestras manos. Si hay una marca Premium comprometida con las tecnologías híbridas esa es Lexus que ya en la anterior generación del RX incluyó una versión híbrida denominada entonces RX 400h junto a otra 100% gasolina. Actualmente, Lexus ha ido más allá en su compromiso con este tipo de mecánicas y este SUV solo está disponible con una mecánica híbrida de 299Cv que se comercializa bajo la denominación Lexus RX 450h.
El Lexus RX 450h que salió al mercado en la segunda mitad de 2009 ha recibido ahora unas pequeñas actualizaciones para enfrentarse al mercado actual con una nueva cara, interiores y líneas de acabado. Hasta ahora, el Lexus RX era un coche para conductores tranquilos y políticamente correctos que disfrutaban de un vehículo con lo último en tecnología y eficiencia. Pero con el lanzamiento de esta tercera generación, el Lexus RX 450h también se convirtió en un vehículo muy dinámico, ágil en el asfalto y con una estética más moderna y deportiva. Aun así, los responsables de diseño de Lexus debieron pensar que el potencial del vehículo era todavía mayor y ahora se han sacado de la manga el acabado F Sport que monta nuestra unidad de pruebas.
Recibe pequeñas actualizaciones estéticas y nuevo acabado F SPort
Como hemos dicho, esta versión que probamos cuenta con el acabado F Sport que a simple vista se diferencia claramente del resto por unas prominentes llantas de 19 pulgadas pintadas en un todo gris oscuro que combina a la perfección con el color de nuestra unidad y que le dan un aspecto mucho menos serio y más deportivo del que este SUV nos tenía acostumbrado. De hecho, es la primera vez que la marca nipona asocia la palabra Sport a un modelo híbrido.
También se diferencia por la parrilla delantera que abandona las lamas horizontales de las versiones más básicas por una rejilla que forma rombos horizontales y presidida por el logotipo de Lexus con detalles en azul que indican que estamos ante una vehículo híbrido. Desde el lateral también se puede apreciar las nuevas taloneras con acabados cromados y en la parte trasera encontramos un nuevo difusor. Además, en todo el vehículo se puede apreciar una altura al suelo un tanto rebajada debido a la suspensión deportiva que monta de serie el LExus RX 450h con este acabado F Sport.
Al abrir la puerta del Lexus RX 450h encontramos todo el refinamiento y el lujo que podemos esperar de la marca, y la mayor novedad con respecto al modelo de hace unos meses es el nuevo diseño del volante. A parte de esto, se aprecian sutiles cambios estéticos que apenas son apreciables y mayores huecos para objetos en la consola central.
Puestos a buscar defectos al diseño interior del Lexus RX 450h F Sport, en el habitáculo no encontramos ese aspecto deportivo y dinámico que sí se aprecia en el exterior de esta versión F Sport. Cuenta con detalles como los pedales de aluminio, pero en un modelo que luce la palabra Sport se echan de menos levas en el volante y un cuadro configurable, que aunque al seleccionar el modo de conducción sport cambia la iluminación azul por la roja, no cuenta con un cuentarevoluciones.
En el interior, cambios más sutiles y aspecto menos deportivo
Como en todos los Lexus, los materiales empleados son de una calidad inmejorable. Todos los plásticos tienen un tacto y ajuste impecable y el cuero utilizado es, junto con el de Land Rover, el mejor que hemos tenido en nuestra redacción.
La posición al volante es extremadamente confortable, gracias a unos sillones que además de contar con múltiples y amplios reglajes eléctricos, son grandes y cómodos para recorrer largas distancias y pasar mucho tiempo al volante. Desde el puesto de conducción se accede con comodidad y facilidad a todos los mandos, incluida la característica palanca de cambios elevada de todas las generaciones del Lexus RX. Habrá a quiénes les extrañe esta posición, pero es una de esas cosas que caracterizan a un modelo y que una nueva generación jamás debería perder.
Dejando aparte la palanca de cambios, la protagonista principal de la consola central es la gran pantalla multifunción cuyo control se realiza con un mando en forma de ratón que se encuentra tras la palanca de cambios. El ratón es muy ergonómico y su uso es extremadamente fácil e intuitivo pero es extremadamente sensible, por lo que cuesta un poco acostumbrarse a su uso en marcha. Incluso así, una vez que lo usas varias ocasiones y coges el tacto, se convierte en una opción muy acertada para controlar gran parte de los sistemas del vehículo.
El único mando que queda un poco a “trasmano” es el control de velocidad que está en una palanca adicional en la parte trasera derecha del volante. El problema viene en que personas con piernas largas, como el que escribe, puede llegar a accionarlo por error con la rodilla al encontrarse demasiado baja. Una posición más elevada de la palanca solucionaría el problema. Algo similar ocurre con el freno de mano. En contra de la actual corriente de frenos eléctricos de botón, el Lexus RX 450h equipa un freno de mano que se acciona con el pie izquierdo y cuyo pedal llega a rozar con el tobillo del conductor cuando se coloca el pie izquierdo en el asidero.
A excepción del problema con el freno de mano, los ocupantes de las plazas delanteras cuentan con todo el espacio necesario y que se espera de un coche de 4’77 metros. Esta amplitud se traslada a la parte trasera que cuenta con espacio suficiente para albergar con comodidad a tres adultos en una postura muy correcta. Esta comodidad de las plazas traseras se acentúan gracias a los asientos traseros reclinables y a que el suelo es totalmente plano. Esto último se consigue gracias a la ausencia de túnel de transmisión en el suelo del vehículo ya que debido alel sistema de tracción que comentaremos más adelante, la conexión entre el tren delantero y el trasero se limita a a cables y conexiones electrónicas.
Espacio suficiente para 5 adultos y bastante equipaje
El maletero cuenta con unos más que suficientes 496 litros que pueden llegar hasta los 825 plegando la segunda fila de asientos. Además, el suelo totalmente plano bajo el que se esconde una rueda de emergencia, hace que cargar objetos sea bastante fácil. En esta tercera generación, el portón del maletero es de accionamiento eléctrico en todas las versiones y que facilita muchísimo la apertura y el cierre, sobre todo para personas de reducida estatura.
La primera sensación al pulsar el botón “power” y poner en marcha el Lexus RX 450h es la misma que en todos los híbridos, ¿ya?. El vehículo arranca en modo eléctrico, por lo que ante la ausencia de ruido y vibraciones sólo sabremos que está arrancado cuando en el cuadro aparece la palabra “ready”. Si salimos con cuidado y sin pisar con fuerza el acelerador, lo haremos en modo eléctrico.
Pero si pisamos con más fuerza, la aguja del medidor de energía que encontramos en vez del cuentarevoluciones, subirá hasta la zona “power” y el V6 térmico de 3.456cc entrará en funcionamiento. Eso sí, lo hace con una suavidad que consigue que prácticamente no apreciemos el cambio sin mirar los indicadores que así nos lo avisan.
El Lexus Rx 450h cuenta con tres motores, un motor térmico de 249Cv, uno eléctrico para eje delantero de 167Cv y otro eléctrico para el eje trasero de 68Cv. Con esto, el Lexus RX 450h cuenta con una potencia máxima en conjunto de 299Cv que resultan más que suficiente para mover los 2.185 Kgs que pesa. Aunque la sensación al volante no es de prestaciones deportivas, con el cronómetro en mano acelera de 0 a 100 km/h en menos de 8 segundos, una cifra muy aceptable para un SUV de este tamaño.
Cuenta con un modo de conducción Sport que permite exprimir al máximo su mecánica, ofreciendo un comportamiento más dinámico de suspensión y dirección y mejorando la respuesta del acelerador. Además, los controles de tracción se vuelven menos intrusivos y como hemos dicho anteriormente, el cuadro abandona el tranquilo color azul para encenderse de un vivo rojo.
Aunque cuenta con tracción a las cuatro ruedas, no estamos ante un 4×4 convencional. La configuración mecánica del Lexus RX 450h hace que el motor térmico y el eléctrico delantero den potencia a las ruedas delanteras y que las ruedas traseras solo cuenten con la potencia del motor eléctrico trasero. Esto hace que incluso con el modo Sport seleccionado, los entusiastas de la conducción deportiva echen de menos más potencia en el eje trasero. Por ello, en casi todas las circunstancias, el coche se comportará más como un tracción delantera que como un 4×4. Esto puede estar bien para consumos, pero mejor entrar con calma en curvas cerradas para que las inercias no acaben en pérdidas de tracción.
No es un coche para ir rápido, sino para disfrutar de su conducción y confort.
A pesar del aspecto deportivo y de las múltiples insignias con la denominación “F Sport”, el Lexus RX 450h no es un vehículo para ir rápido, sino para disfrutar de su conducción y su confort de marcha. Una vez explicado el sistema de tracción, encontramos dos grandes problemas para realizar una conducción agresiva: el cambio y el consumo.
El Lexus RX 450h cuenta con una caja de cambios que la marca denomina “E-CVT AI Shift” pero que no es otra cosa que un cambio de variador continuo. Para los que desconozcan su funcionamiento, la mejor forma de explicar su funcionamiento es compararlo con el cambio de un ciclomotor. Cuando aceleramos a fondo, el motor se revoluciona al máximo y no notamos los cambios de marcha, sino que va cogiendo velocidad de una manera continua. Este sistema choca bastante la primera vez que se conduce en un coche, ya que por ejemplo al incorporarnos a una autovía desde un stop, el motor estará revolucionado de manera constante desde que salgamos hasta que alcancemos nuestra velocidad de crucero.
Esta pega del cambio, está directamente relacionado con el otro problema de realizar una conducción deportiva en el Lexus RX 450h, el consumo. Estamos ante un vehículo híbrido que presume de unos consumos muy bajos y eficientes que realmente pueden conseguirse. Pero en este tipo de coches pasa lo contrario que en los coches comunes, gastan mucho menos por ciudad y en trayectos cortos que por autovías.
Esto es debido a que a velocidades de 120 km/h iremos utilizando siempre el motor térmico por lo que al ser gasolina el consumo es superior al de un vehículo diésel similar. Sin embargo, en trayectos urbanos o semi urbanos, el Lexus RX 450h no tiene rival en cuanto a consumos y hemos llegado a hacer un tramo de 17 kilómetros con una media de 2’6 litros a los 100 km. En los más de 1.500 kms que hemos realizado a la unidad que Lexus nos ha cedido para esta prueba, el consumo medio con un uso mixto ha sido de 10’8 litros a los 100 km.
Realmente estamos ante un 4×2 con una ayuda añadida en el eje trasero
Una vez analizada su mecánica, queda claro que el Lexus RX 450h no es un 4×4 al uso, sino más bien un 4×2 con una ayuda añadida en el eje trasero. Aunque es cierto, que a muchos usuarios pueda sorprender este hecho de un vehículo de este segmento y tamaño, dada la configuración del vehículo y su mecánica queda claro que era lo pretendido por Lexus. Por ello y teniendo claro el tipo de vehículo que es y a lo que está destinado, el objetivo está claramente cumplido.
Quizás, la única incongruencia del coche sea haberle añadido la palabra y el aspecto Sport a un vehículo que no está diseñado para realizar una conducción deportiva y dinámica, sino más bien para una conducción tranquila, confortable y eficiente. Y en eso no tiene rival en el mercado actual, incluso con potenciales competidores como el Cayenne Híbrido.
El Lexus RX 450h puede convertirse en una gran alternativa a los SUV’s diésel, frente a los que cuenta con ventajas como el silencio de marcha tanto en ciudad al ir en modo eléctrico, como también en carretera con el V6 térmico en funcionamiento. Realizando una conducción tranquila podremos sacar consumos similares o incluso inferiores a cualquier alternativa diésel, pero cuando decidamos pisar el pedal a fondo encontraremos el brío y la prontitud de una mecánica de gasolina.
Por si el diseño atractivo y actual, las buenas prestaciones y su conducción agradable y confortable no te convencen, si conduces un Lexus RX 450h podrás presumir de llevar un vehículo con bajas emisiones y eso hoy en día está muy bien visto. Eso sí, para hacerte con uno como el que hemos probado tendrás que desembolsar la nada despreciable cifra de 77.600€.
Es cierto que es mucho dinero, pero trae de serie prácticamente todo el equipamiento por el que otras marcas Premium te hacen pagar una cantidad increíble de dinero. Personalmente, siempre he preferido coches con un precio relativamente fijo y bien equipados, a coches con precios de salida bajos que luego se encarecen enormemente al configurarlo con cosas tan necesarias como faros de xenón, control de velocidad, etc.
Nos ha gustado:
- Consumos con conducción tranquila.
- Suavidad y silencio en marcha.
- Materiales y acabado del interior.
- Aspecto deportivo y actual.
No nos ha gustado:
- Consumos con conducción rápida.
- Comportamiento offroad al no ser un 4×4 puro.
- Comportamiento poco “F Sport”.
Datos técnicos
- Combustible: Gasolina híbrido
- Potencia máxima combinada: 299Cv
- Par máximo: 34’2 mkg
- Aceleración de o a 100 km/h: 7’8 segundos
- Velocidad máxima: 200 km/h
- Consumo medio homologado: 6’3 litros / 100 km
- Consumo medio de la prueba: 10’8 litros / 100 km
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