Con el final de una era da comienzo la siguiente. Sólo nos separan unas semanas desde que conocimos la noticia de que el superéxito de ventas de la firma del toro, el Gallardo, cesaba su producción, y pese a que a los fanáticos de la marca eso nos entristeciera, Lamborghini ya tenía preparado un sucesor que no dejará que el recuerdo de una época pasada no nos atormente demasiado tiempo.
Como es costumbre dentro de la firma italiana, los nombres de los vehículos provienen de toros que lucharon y quedaron invictos en las plazas de toros de los países en cuya cultura se practica este tipo de eventos. En este caso el nombre elegido ha sido Lamborghini Huracán, en honor a un toro que quedó invicto tras luchar en Alicante en agosto de 1879.
El diseño del nuevo Huracán no nos impide recordar la línea de su hermano mayor, el Lamborghini Aventador, cuyo diseño es capaz de unir la parte delantera del habitáculo con la trasera a través de una sola línea. Las ventanas completan la silueta con una forma hexagonal que se integra perfectamente en la figura del coche. El frontal emula la agresividad del Aventador, incluyendo un paragolpes frontal que evoluciona del diseño del paragolpes que ya equipaba el Gallardo y los faros con tecnología LED similares a los de su hermano mayor. Por su parte, la trasera continúa la filosofía de diseño que Lamborghini ha utilizado en sus últimos diseños, un gran difusor trasero que alberga las enormes salidas de escape, situadas a cada extremo del difusor, y el disimulado diseño final de la línea del coche, la cual termina en un pequeño spoiler integrado en la carrocería y que contiene los faros traseros.
El diseño interior del nuevo Huracán combina en armonía la más avanzada tecnología de información y entretenimiento con el buen gusto por los acabados que predomina en la marca. Surcado por una pantalla TFT a color de 12,3 pulgadas, donde se muestra desde el cuentarrevoluciones a los mapas del navegador. Un diseño minimalista que otorga sensación de ligereza, da cabida al buen hacer de la firma, combinando terminaciones de extraordinaria artesanía con acabados de lujo, como los asientos en Nappa y Alcántara.
Llegando a la parte mecánica, el Lamborghini Huracán continúa con su filosofía de evolución desde el diseño del Gallardo. Equipado con un renovado motor V10 de 5.2 litros, sus prestaciones aumentan hasta los 610 CV entregados a 8.250 rpm y un par motor máximo de 560 Nm a 6.500 rpm. Estas cifras se traducen en unas prestaciones de alto nivel, registrando una velocidad máxima superior a 325 km/h, una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos, y de 0 a 200 km/ en tan sólo 9,9 segundos. Con un peso en seco de 1.422 kg y los tres modos de conducción diferentes (Calle, Sport y Carrera), el Huracán posee una dinámica de conducción similar a la de un coche de carreras.
En cuanto a equipamiento mecánico, la nueva transmisión Lamborghini Doble Embrague en combinación con la tracción a las cuatro ruedas con control electrónico forman parte del equipamiento de serie, al igual que los frenos de carbono y cerámica. Para disponer de la dirección de asistencia variable Lamborghini Dynamic Steering y la suspensión magnética con control de la amortiguación habrá que recurrir al equipamiento opcional del nuevo Huracán.
Para poner el broche final al 50 aniversario de Lamborghini, el fabricante debía presentar un nuevo modelo que transcendiese de algo puramente limitado, como el Lamborghini Veneno Roadster del que sólo se venderán nueve unidades en todo el mundo, y crear un nuevo éxito de ventas como lo fue, durante diez años, el Lamborghini Gallardo. Desconocemos el precio de lanzamiento que tendrá el nuevo Lamborghini Huracán, al igual que muchos de los detalles aún por confirmar por la firma, pero si sabemos que habrá que esperar a la primavera de 2014 para poder verlo rodando por nuestras carreteras.