Hasta ahora, el campo de la hibridación ha estado enfocado hacia la reducción de consumos en los vehículos para el consumidor de a pie. Hay ciertas excepciones que ofrecen algunos vehículos de altas prestaciones que equipan soluciones híbridas, pero no es algo que esté al alcance de un conductor común, tanto por número de producción de éstos vehículos como por el hecho de que su precio se dispara. Audi quiere poner fin a estas limitaciones, ofreciendo un compacto premium como el A3 Sportback e-tron con la última tecnología sin tener que renunciar a prestaciones elevadas ni a unos consumos contenidos.
Estamos hablando del primer vehículo híbrido enchufable que ofrece la casa de Ingolstadt. Comenzando por su sistema de propulsión, su motor de gasolina 1.4 TFSI es un conocido ya dentro del grupo VAG. Fabricado en aleación ligera y con ciertos avances que permiten reducir su consumo y emisiones, en éste caso aporta 150 caballos de potencia máxima y 250 Nm de par entre 1750 y 4000 revoluciones, lo que aporta gran elasticidad, siempre y cuando sea necesaria la entrada en acción de éste motor. Veamos el porqué de ésta afirmación.
La mayor particularidad de éste coche es su capacidad para ser propulsado sólo mediante baterías y energía eléctrica. Su avanzado sistema consta de un motor eléctrico de 75 KW de potencia máxima y 330 NM de par disponibles desde cero revoluciones, que es capaz de propulsar el coche de forma autónoma y sin depender del motor térmico una distancia de 50 kilómetros a un máximo de 130 kiómetros por hora con el objetivo de aumentar la eficiencia, siendo suficiente para la mayoría de desplazamientos cortos. Éste conjunto puede ser recargado en una toma de corriente doméstica en un tiempo de 3 horas y 45 minutos, mientras que en un enchufe industrial de mayor capacidad el tiempo se reduce hasta las dos horas. El sistema de baterías acumuladoras consta de 96 celdas y pesa 125 kilogramos, a la vez que sirve para reducir la capacidad del depósito de gasolina hasta los 40 litros. No es necesario mucho más, ya que todo el conjunto es capaz de ofrecer una autonomía máxima de 940 kilómetros, mientras que consigue un impresionante consumo homologado de sólo 1,5 litros cada 100 kilómetros en ciclo NEDC. Podemos elegir entre tres modos de gestionar el consumo: el modo EV que prioriza la tracción eléctrica, el modo deportivo S que busca máximas prestaciones y el modo hybrid hold que permite reservar la energía eléctrica disponible para emplearla en las condiciones más eficientes posibles.
Como en la mayoría de los híbridos, las baterías pueden ser recargadas en marcha, ya que el coche puede aprovechar las inercias al circular descendiendo, reteniendo mediante freno motor y proporcionando ésta energía a las baterías. También se aprovecha el calor proveniente de la frenada para el mismo objetivo, convertirse en electricidad útil para la recarga. Volviendo al tema de las prestaciones, como sabemos en los híbridos enchufables no se suma la potencia total del motor térmico mas el eléctrico como en los híbridos puros, sino que se complementan para ofrecer una potencia máxima menor de dicha suma. En éste caso la cifra máxima se sitúa en unos notables 204 caballos, que impulsan los 1.580 kilogramos del conjunto de 0 a 100 en 7.6 segundos. Cifras dignas de un hot hatch, pero pensemos que con éste coche podemos conseguir medias increíbles de 1.5 litros si queremos circular con normalidad. Como vemos, las mejores prestaci0nes combinadas con una eficiencia inusitada, gran calidad de rodadura y confort interior, características que podrían hacer del A3 Sportback e-tron todo un superventas.
