Después de tres días de competición, 306,53 km de tramos y celebrando el décimo aniversario de su debut en esta categoría con un World Rally Car, Latvala se alzaba con la victoria, con una ventaja de 1 minuto y 50.1 segundos sobre el segundo clasificado, el español Dani Sordo; y 2 minutos y 14 segundos sobre el tercero, Thierry Neuville con su Ford Fiesta RS WRC.
El finlandés no tuvo el mejor inicio de rally posible, no obteniendo un gran crono en el tramo de clasificación, debiendo salir en un puesto no muy favorable en los primeros tramos. A pesar de este inicio de rallye, Latvala finalizó la primera jornada en tercera posición, y se situó líder el sábado por la mañana después de que Evgeny Novikov golpeara un banco de arena y rompiera una rueda de su Fiesta RS WRC.
“Es increíble. Tuvimos un comienzo de temporada complicado, por eso esta victoria es tan importante. Han pasado 10 años desde que debuté con un World Rally Car aquí y me ha llevado todo ese tiempo para ganar en Grecia. Ayer no pensaba en ganar, pero esta mañana he pensado mucho, sobre todo en el Power Stage“, dijo Latvala.
Sordo se mantuvo en la segunda posición desde el inicio del rallye y no fue superado en ningún tramo de la prueba. El español se mantuvo conservador durante toda la carrera, se mantuvo apartado de la pelea por la victoria que mantuvieron Latvala y Novikov, intentando mantener la mecánica de su Citroën DS3 WRC, y logrando un resultado que compensara el complicado arranque de temporada que había tenido.
“Después de todos los problemas que he tenido este año en otros rallyes, este resultado ha sido muy bueno y me ha aportado mucha confianza“, dijo Sordo.
El tercer puesto de Neuville fue bien merecido, gracias a una buena estrategia y un buen ritmo de carrera.
Andreas Mikkelsen obtenía una cuarta posición en el Rallye Acrópolis, consiguiendo su mejor resultado hasta ahora con un Polo R WRC. A lo largo del fin de semana, un pinchazo y los continuos problemas con los frenos, hizo que la batalla que mantenía con Nasser Al-Attiyah se declinara del lado del balanza del catarí, pero un adelantamiento al Fiesta RS WRC de Nasser, tres tramos antes del final, permitía al noruego regresar a la asistencia con una ventaja de 17.5 segundos.
El Rallye Acrópolis hizo honor a su fama como uno de los rallyes más duros del campeonato, siendo un fin de semana complicado para muchos pilotos. Mads Ostberg terminó sexto tras perder más de tres minutos en el primer tramo cuando desllantó una rueda de su World Rally Car contra un bordillo.
Mikko Hirvonen consiguió la octava plaza después de sufrir problemas de dirección en el primer plano, costándole casi seis minutos de retraso. El líder del campeonato, Sebastien Ogier, concluyó décimo tras esfumarse sus opciones en la extenuante especial de apertura por problemas con la presión de gasolina de su Polo R.
El francés sumó el máximo de puntos extra al ganar la Power Stage. Ogier ya tiene una ventaja de 52 puntos sobre su compañero Latvala en la cabeza del campeonato. La tercera posición es para Sebastien Loeb que se encuentra seis puntos más atrás del noruego.