Carrera de altos vuelos e intensa como pocas la vivida ayer domingo en las calles monegascas. Después de la sorprendente clasificación del sábado y con las previsiones de la lluvia que al final se resisitió a terminar de aparecer, la carrera se antojaba interesante. Y lo ha sido desde la primera vuelta hasta la última. Salida accidentada donde pudimos ver al monoplaza de Kobayashi despegar (foto arriba) como si de un Boeing se tratara, incidente en el que lamentablemente Pedro Martínez de la Rosa, después de un fin de semana fantástico, también quedó fuera de carrera.
Fin de semana accidentado el de Mónaco, solo hay que ver la siguiente imágen de la GP3 (personalmente pone los vellos de punta). Afortunadamente en ninguna de las categorías disputadas ha existido ningún herido.
Muchas cosas que comentar de la carrera, pero en un circuito en el que a pesar de la existencia de KERS y DRS adelantar queda demostrado que es prácticamente imposible la estrategia de paradas y neumáticos es fundamental. Aquí mi suspenso del Gran Premio para el equipo Toro Rosso que hizo entrar a Vergne a falta de apenas unas vueltas y ocupando la séptima posición (hubiera sido el mejor resultado de su carrera y unos puntos fundamentales para el equipo) a poner neumáticos intermedios cuando una lluvia tímida amenazó con caer sobre el asfalto. Debido a esto terminó en la posición 12 llegando a perder 6 segundos por vuelta con respecto a sus competidores.
El “trenecito de cabeza” (Webber, Rosberg, Alonso, Vettel, Hamilton y Massa) no entró a cambiar los slicks y nos dió un espectáculo de conducción. Del primero al último de ellos sólo había 6’1 segundos de diferencia por un circuito estrechísimo y con unas condiciones de grip prácticamente nulas debido a la lluvia y a la agonía de los neumáticos a final de carrera. Cada curva fue un espectáculo.
Después de todo lo acontecido Webber ganó la carrera (media la gano el sábado con la pole) seguido de un Rosberg que estuvo muy fino y de un Alonso (líder del mundial) que adelantó una posición con su fantástica salida (como suele ser normal) y otra en boxes con una estrategia acertada del equipo Ferrari (esto no suele ser tan normal…).
¡Hasta la próxima en Canadá!