Audi se acerca a la conducción pilotada gracias a un sistema que aparca el vehículo en garajes o parkings de forma completamente autónoma. El aparcamiento se realizará una vez el conductor se haya bajado del coche y, mediante el mando a distancia o un smartphone, indicarle que debe realizar el estacionamiento, con la ayuda de sensores y cámaras que supervisarán el entorno, o que busque una plaza de aparcamiento disponible.
El sistema de sensores equipados en el vehículo le indican las maniobras de giro que debe realizar para introducirse por sí solo en el hueco o en el garaje; en el caso de que el coche detecte un obstáculo, se detiene inmediatamente. Una vez finalizado el estacionamiento, apaga el motor, desactiva el encendido y bloquea las puertas, enviando un mensaje de confirmación al conductor. En el caso de desear sacar el vehículo de la plaza de aparcamiento o garaje, éste se lleva a cabo de igual manera.
Pero esto no acaba aquí, y Audi quiere llegar un poco más lejos para traer a nuestros días la tecnología propia del futuro. La firma alemana está trabajando en un sistema que permita al vehículo estacionar en parkings o aparcamientos subterráneos de forma totalmente autónoma. Todas las órdenes se mandará a través de un smartphone y la pantalla del sistema MMI de Audi.
Al configurar el sistema de navegación del vehículo con el destino final del usuario, aparecerá de forma automática la disponibilidad de plazas de aparcamiento en los parking más próximos a su destino. Una vez en la entrada del aparcamiento, el usuario podrá seleccionar servicios adicionales a través de la pantalla del sistema MMI, tales como el lavado del vehículo, o la recarga de las baterías, en el caso de tratarse de un coche eléctrico. Finalmente, el conductor sale del vehículo y utiliza el smartphone para activar el sistema.
El ordenador central en el parking se hace cargo de algunas partes de la función de control y dirige al vehículo vía WLAN hasta la siguiente plaza de aparcamiento libre, tras haber analizado datos como el tamaño del coche. El ordenador del parking dispone de un mapa que registra la ocupación de las plazas de aparcamiento y gracias a ello se puede planificar una ruta que garantice que el vehículo llegará a su destino. Para recuperar su vehículo de nuevo, el conductor sólo tiene que programar la hora de recogida a través de su smartphone y el vehículo aparece de forma automática en el punto de recogida.
Audi está equipando, actualmente, un parking en Ingolstadt con este tipo de tecnología para realizar ensayos reales. Además, la marca alemana ya ha puesto en marcha un proyecto piloto para la implantación del sistema “Audi connect wireless payment”, que comprende el pago inalámbrico del parking en el vehículo como un servicio más de Audi connect.